Daytona, la cuna de la velocidad, celebra el 75 aniversario de la NASCAR

on la Daytona 500 arranca oficialmente la temporada de la NASCAR este domingo en el Daytona International Speedway. Tanto los equipos de carreras y los fanáticos están hambrientos por ver carreras otra vez y todos llegarán con entusiasmo a Daytona Beach, Florida esta semana.

Es más que una pista. Es el origen de todo.

Desde la icónica reunión de innovadores de las carreras dirigida por el fundador de la NASCAR Bill France Sr. en el Streamline Hotel ubicado junto a la playa, hasta los marcadores históricos que salpican la famosa costa de arena de Daytona Beach donde comenzaron los humildes orígenes de este deporte hace 75 años, la edición de este año de la carrera más grandiosa de la NASCAR, es la bandera verde perfecta para enmarcar esta importante celebración del 75.° Aniversario.

La intensidad y la expectativa que popularizaron por primera vez las carreras de la NASCAR hace tantas décadas en la famosa arena de Daytona Beach, permanece absolutamente intacta y en plena exhibición este fin de semana para la 65ta. edición de las 500 Millas de Daytona “The Great American Race” en el principal superspeedway del deporte, a unas pocas millas de distancia.

Austin Cindric de Team Penske es el ganador defensor de la carrera, logrando su primera victoria en la NASCAR Cup Series en febrero pasado en su primera salida en la Daytona 500, uno de los nueve pilotos en la historia de la serie en obtener su primera victoria en esta icónica carrera.

Es un guiño a la increíble historia de la carrera que ocupa un lugar indeleble en el deporte.

“Me encanta la historia de todos modos, así que para mí, este es nuestro lugar de nacimiento”, dijo el presidente de la NASCAR, Steve Phelps. “No solo como deporte, sino también por lo especial que significa esta instalación.

“Es nuestra joya de la corona, la carrera en sí, la pista y la remodelación. Pero cuando pasas por ese túnel, es ese momento especial justo cuando llegas al otro lado y miras hacia atrás y es genial. Y lo especial de esta carrera es seguro porque es el comienzo de la temporada y todos tienen esperanza. Voy a ganar. Mi equipo va a ganar. Mi piloto va a ganar. Creo que eso es algo genial”.

Lee Petty ganó la primera Daytona 500 en la pista de 2.5 millas en 1959 y su hijo Richard se convertiría en el primer siete veces campeón de la NASCAR Cup Series, así como  el piloto de la serie con más victorias de todos los tiempos (200).

Un miembro original del Salón de la Fama de la NASCAR conocido simplemente como “El Rey”, las siete victorias de Petty en las 500 Millas de Daytona son inigualables.

Muchos de los grandes de todos los tiempos en el deporte cimentaron su legado de manera similar y apropiada con victorias en las 500 Millas de Daytona.

Otro miembro del Salón de la Fama, el tres veces campeón de la serie, Cale Yarborough, tiene cuatro coronas de Daytona 500, solo superadas por las de Petty.

Solo otros 10 pilotos tienen múltiples victorias, incluidos Denny Hamlin de Joe Gibbs Racing (3) y Jimmie Johnson de Legacy Motor Club (2), quienes esperan ganar otra vez este fin de semana.

El siete veces campeón de la serie, Johnson, es el último piloto en ganar el campeonato de la NASCAR Cup Series en el mismo año en que ganó las 500 Millas de Daytona en 2013.

Grandes pilotos de otros géneros, íconos de las series open wheels como Mario Andretti (1967) y A.J. Foyt (1972) han alzado trofeos de Daytona. Y esta semana, la estrella de deportes de acción Travis Pastrana y el habitual de la Indycar Series, Conor Daly, esperan agregar sus nombres a esa lista única de ganadores de Daytona 500 también.

Si Cindric obtuviera otra victoria el domingo, sería solo el quinto piloto en la historia de la carrera en ganar las 500 Millas de Daytona en forma consecutiva; el último fue Hamlin en 2019 y 2020. Antes de eso, Sterling Marlin creó una historia propia, ganando las carreras de 1994 y 1995: las dos primeras victorias de su carrera en la serie llegaron en la carrera más importante.

El tres veces ganador de las 500 Millas de Daytona, Dale Jarrett, es el último piloto en ganar desde la Pole Position, lo hizo en 2000. Solo dos pilotos lo han hecho varias veces: Yarborough (1968 y 1984) y el miembro del Salón de la Fama, Bill Elliott (1985 y 1987).

El difunto y siete veces campeón Dale Earnhardt es el piloto con más victorias en la historia del Daytona International Speedway con 34, la mayoría de esos trofeos en una combinación de The Clash, las carreras de clasificación de Duel, la Xfinity Series, la Serie IROC y la Cup Series. Su única victoria en DAYTONA 500 en 1998, sin embargo, sigue siendo una de las victorias más icónicas del deporte.

Incluso con una vitrina de trofeos llena de campeonatos, ganar las 500 Millas de Daytona es un honor y un logro como ningún otro; es asegurar que su nombre ocupe un lugar en la gran historia de la NASCAR en la pista asociada para siempre con el deporte.

“Las 500 siempre tienen un gran ambiente y las carreras siempre son geniales porque todos quieren poner su nombre en la lista de ganadores de esta carrera”, dijo Hamlin, quien con una victoria el domingo empataría a Yarborough con cuatro victorias en las 500 Millas de Daytona.

“Significaría mucho para mí personalmente ascender en esa lista”, dijo Hamlin sobre las implicaciones históricas. “Me siento muy bien al respecto. [El Jefe de Equipo] Chris [Gabehart] y mi equipo hacen un trabajo increíble, especialmente en este momento y con cada carrera, para darme una gran oportunidad, así que estoy seguro de que tendremos una gran oportunidad el domingo”.

Mucho ha cambiado durante las siete décadas y media de competencia desde que la NASCAR se convirtió en un organismo sancionador en esa famosa reunión a puerta cerrada en el Streamline Hotel.

Los autos lucen y corren de manera diferente, el cronograma incluye todo tipo de configuraciones de pista (pista corta, superspeedways, circuitos mixtos, circuito urbano) en una variedad de emocionantes ciudades desde Los Ángeles hasta Atlanta; desde Homestead-Miami hasta el debut de un circuito callejero en el centro de Chicago este mes de junio.

Las innovaciones de seguridad, desde la pista hasta el automóvil y el piloto, han evolucionado y brindan confianza. El alcance de la transmisión de la temporada es mundial. Y la grilla de competidores nunca ha sido más diversa.

Las 500 Millas de Daytona no solo marcan oficialmente el comienzo de la temporada, sino que durante mucho tiempo ocuparon un lugar especial, brindaron una “sensación” única y fueron las victorias más celebradas en el deporte, todo el resultado de esa reunión en la playa hace casi ocho décadas.

“No hay nada como llegar a la bandera verde en las 500 Millas de Daytona”, dijo el ganador de 2007, Kevin Harvick, quien se retirará de la competencia al final de la temporada.

“La razón es difícil de explicar a menos que lo hayas hecho. No hay otra carrera como la Daytona 500 y me di cuenta de eso cuando gané en 2007. Miras los nombres en ese trofeo y regresas y miras la historia de nuestro deporte y mucho de ella se ha hecho en Daytona.

“Ya sea de la playa o de la gran pista, es el “quién es quién” de la NASCAR. La Daytona 500 es la carrera más grande de la que jamás serás parte y es la mayor victoria que jamás tendrás. Definitivamente es el corazón de NASCAR y lo que hacemos”.